Diseñador de Producto vs. Product Manager: diferencias, responsabilidades y aptitudes

En el mundo de la innovación, dos roles emergen como pilares fundamentales en el proceso de desarrollo e implementación de productos y servicios: el diseñador de producto y el product manager. Ambos perfiles son esenciales a la hora de llevar un proyecto o negocio a buen puerto.

Si bien pudiera parecer que estos dos perfiles ejecutan tareas similares, sus enfoques, habilidades y responsabilidades son sutilmente diferentes lo que, en buena convivencia, darán lugar a unas dinámicas de trabajo productivas y en búsqueda constante de la excelencia en la creación de productos y servicios de cualquier índole.

En este post voy a intentar detallarte cuáles son los aspectos fundamentales que definen tanto al diseñador de producto como al product manager y cuáles son las razones por las que son perfiles a considerar de cara a abordar cualquier tipo de proyecto que desees emprender.

El Rol del Diseñador de Productos: Más Allá de la Estética

Pese a las falsas creencias, los diseñadores de producto van más allá de la estética de un servicio. Un buen product designer es aquel que investiga, empatiza y va más allá de cara a entender lo que hay en la mente de los usuarios con el fin de comprender sus deseos, necesidades y frustraciones con el objetivo de concebir, a través del design thinking y la creatividad, ideas que cubran las necesidades de los usuarios y les aporten valor.

Un diseñador de producto suele ser una mente inquieta en búsqueda constante de la perfección. Es un perfil sumamente humanista capaz de empatizar con el contexto en el que se mueve o para el cual trabaja y es capaz de dirigir todo el proceso de creación de un producto y servicio, desde la detección de oportunidades de negocio, el planteamiento de retos o la definición de la visión de producto pero siendo guiado e inspirado, en todo momento, por las necesidades de los usuarios.

Aptitudes del Diseñador de Productos: Creatividad, Empatía y Visión de Negocio.

• Creatividad: Sin lugar a dudas, este es el valor fundamental de un diseñador de producto. Poseen una creatividad desbordante para idear soluciones innovadoras a problemas complejos. Poseen un modelo de pensamiento lateral lo que les permite pensar diferente y encontrar nuevas formas de abordar los desafíos de cualquier proyecto en aras de construir soluciones que aporten valor.

• Empatía: La capacidad de ponerse en los zapatos del usuario es fundamental para un diseñador de productos. De hecho, esta capacidad, es la fuente de inspiración de este tipo de perfiles. La empatía les permite comprender las necesidades, deseos y frustraciones del usuario final, lo que les permite diseñar productos que resuelvan problemas de manera efectiva y adaptadas a las necesidades de los usuarios. 

• Habilidades técnicas: Además de la creatividad y la empatía, los diseñadores de producto deben poseer habilidades técnicas sólidas en áreas como el diseño gráfico y el prototipado rápido ya que, estas habilidades, les permiten convertir sus ideas en productos tangibles y funcionales.

• Visión de negocio: existe cierta tendencia a pensar que el diseñador de producto sólo se basa en las necesidades de los usuarios pero, un product designer tiene que tener una visión clara de negocio ya que esto es lo que permitirá diferenciar las grandes ideas de lo que yo siempre llamo las "idas de olla".

Un buen diseñador de producto no es aquel que únicamente tiene en consideración los deseos y necesidades de los usuarios si no que también es capaz utilizar su empatía y creatividad para tener en cuenta los aspectos técnicos y de negocio de cara a construir una solucines que sean rentables, factibles y sostenibles en el tiempo sin dejar de aportar valor a los usuarios.

Un referente en este área como puede ser Steve Jobs que se inspiraba en las necesidades de los usuarios pero, a su vez, tenía una alta capacidad para combinar todas estas aptitudes en todos los aspectos de creación de un producto y servicio. Si piensas en todos los productos que creó el tío Esteban, la inspiración surgía de las necesidades de los usuarios pero, en ningún caso se dejaba de lado la tecnología y el negocio de cara a construir esas soluciones.

El Product Manager: director de la estrategia y la ejecución

Los Product Managers son, sin duda, los maestros de la estrategia y la ejecución. Su papel abarca desde la identificación de oportunidades en el mercado hasta la coordinación de equipos multifuncionales para llevar un producto desde la idea hasta el mercado.

Los Product Managers suelen ser un perfil mucho más analítico y racional. Su objetivo es construir una visión y son los garantes de que esto se cumpla mediante la toma de decisiones estratégicas basadas en datos y feedback del usuario que aseguren el éxito a largo plazo.

Aptitudes del Product Manager: Visión Estratégica, Habilidades de Comunicación y de Gestión de Equipos.

• Visión Estratégica: Los product managers deben tener una visión estratégica del producto y su mercado. Esto implica comprender las tendencias del mercado, identificar oportunidades de crecimiento y definir una hoja de ruta clara para el desarrollo y la evolución del producto a largo plazo. En este proceso, un papel fundamental del product manager es tomar decisiones en todo el proceso de construcción que aporten valor a cada paso y que no pongan en riesgo la visión del proyecto.

• Pensamiento Analítico: Los product managers deben ser capaces de analizar datos y métricas para tomar decisiones informadas sobre la dirección del producto. Esto implica la capacidad de recopilar y analizar datos relevantes, extraer insights significativos y ajustar la estrategia del producto en consecuencia.

• Habilidades de Comunicación: La comunicación efectiva es clave para el éxito de un product manager. Deben ser capaces de transmitir la visión del producto de manera clara y persuasiva a todas las partes interesadas, desde el equipo de desarrollo hasta la alta dirección y los clientes. Además, deben ser hábiles en la escucha activa para comprender las necesidades y preocupaciones de todas las partes involucradas.

En definitiva, un buen product manager es capaz de diseñar la estrategia tomando decisiones basadas en el análisis de los datos, la comunicación y los recursos de cara a construir la visión. 

A mí me gusta ver cada proyecto como una historia de vida en la que, aún teniendo muy claro hacia donde quieres ir, surgirán problemas en el camino que tendrás que solventar con creatividad y determinación. En este sentido, una buena gestión de producto es aquella que es capaz de tomar decisiones que estén siempre orientadas a aportar valor en cada paso del camino hacia la ejecución de la visión.

Diseñador de Producto o Product Manager. ¿Qué necesito para que mi proyecto funcione?

Si bien los diseñadores de producto y los product managers tienen enfoques diferentes, su colaboración es fundamental para el éxito de cualquier proyecto sea de innovación o no. Al unir fuerzas, combinan la creatividad del diseño con la disciplina estratégica, creando un equilibrio perfecto entre la visión y la ejecución.

Si te encuentras ante un problema con tu negocio y no eres capaz de detectar eso que impide que tu proyecto despegue o incluso si lo que quieres es emprender y montar un nuevo negocio pero no sabes cómo, quizás deberías de contemplar la colabración con un diseñador de producto ya que será capaz de detectar problemas y aportar soluciones creativas que te permitiran abrir la mente a nuevas posibilidades.

Por otro lado, si tienes clara tu visión y el problema es a la hora de ejecutar tu visión, el product manager surge como un rol fundamental ya que será capaz de organizar todas las tareas necesarias y coordinar los equipos involucrados de cara a abordar la visión de tu producto.

Uniendo Aptitudes para Impulsar la Innovación

La combinación de la creatividad del diseñador de productos y la visión estratégica del product manager, es fundamental de cara a impulsar la innovación. Al desarrollar y cultivar estas aptitudes clave, los profesionales pueden desempeñar roles más efectivos en la creación y gestión de productos innovadores que no solo cumplan con las expectativas del mercado, sino que también inspiren y mejoren la vida de tus clientes.